Desigualdad en Salario Psicológico Mantiene Tendencia de “Gran Renuncia”
El terreno laboral global se encuentra caracterizado por una crisis de contratación y una gran competencia por el talento. Los últimos dos años han estado marcados por renuncias masivas que el académico estadounidense, Anthony Klotz, denominó como “La Gran Renuncia”. Esta tendencia, de múltiples razones, puede ser evitada por las compañías mediante la mejoría de las necesidades emocionales de los colaboradores, en especial, en los de menores ingresos.
En este sentido, la consultora Mckinsey afirma que los líderes empresariales reconocen estas necesidades emocionales, tanto por la sensación de recompensa que se tiene ante los logros, como por la frustración cuando se experimenta microgestión, al igual que la ira tras el trato injusto o el deseo de ser parte de un grupo o de sentir que tienen un trabajo interesante y significativo.
Sin embargo, la misma consultora revela, en el artículo Satisfaga las necesidades psicológicas de su gente, toda su gente, que muchos líderes empresariales consideran que solo quienes gozan de un nivel similar de éxito al de ellos pueden valorar los aspectos de bienestar no relacionados con el pago económico.
“Las personas con trabajos mal pagados también quieren que se satisfagan sus necesidades psicológicas en el trabajo. Sin embargo, los datos muestran que esas necesidades generalmente no se satisfacen, lo que sí sucede con las personas con mayores ingresos”.
Según la consultora, esta situación puede ser hasta cierto grado inevitable, ya que existe un límite de autonomía que puede ser otorgado a un trabajador en línea de producción, en tanto que un conductor de camión puede carecer inherentemente de contacto social.
“Sin embargo, la mayoría de los trabajos podrían mejorarse para proporcionar un grado mucho mayor de satisfacción psicológica”, agrega el artículo.
Revalorizando al colaborador
La alta rotación actual representa una contratación y un reciclaje costosos y que consumen mucho tiempo, sin mencionar la pérdida de productividad.
Por ello, McKinsey recomienda seis puntos a tomar en cuenta para que los líderes empresariales frenen esta tendencia y aumenten positivamente los resultados de sus equipos:
- Apreciar que la mayoría de las personas, en todos los niveles de la organización, buscan algo más que dinero por su trabajo, es decir, ver cubiertas necesidades emocionales.
- Reconocer que las circunstancias de los trabajadores varían significativamente en diferentes trabajos y equipos para con ello generar empatía de las diversas situaciones.
- Analizar la eficacia con la que se satisfacen las necesidades psicológicas en cada cargo y área, con el fin de comparar rendimiento y mejores prácticas.
- Identificar cómo pueden ser mejor cubiertas las necesidades psicológicas, esto puede ser con cambios en la cultura organizacional en la rutina de cada colaborador.
- Generar iniciativas, proyectos y procesos para ayudar a que los empleados se sientan más competentes, sobre todo desarrollando y reconociendo las habilidades, la autonomía, la interacción, el interés o propósito de sus funciones.
- Monitorear y evaluar resultados: “tanto en términos de cuán satisfechos están los empleados con sus necesidades psicológicas como en términos de resultados comerciales y bienestar”.
Fuente: El Asegurador